Una startup suiza llamada FastVolt desarrolló una nueva batería de litio que puede recargarse al 80% de su capacidad en apenas 180 segundos, sin perder eficiencia con el tiempo. Este avance es posible gracias al uso de nanotubos de carbono, que permiten una conducción ultrarrápida de electrones y mejor distribución de carga.
Las pruebas demostraron que esta batería conserva más del 95% de su capacidad después de 2000 ciclos de carga, una cifra superior a las de las baterías actuales.
Este desarrollo podría tener un gran impacto en:
- Vehículos eléctricos, reduciendo los tiempos de carga a minutos
- Dispositivos móviles, con cargas completas en menos de 5 minutos
- Almacenamiento energético para energías renovables
🌍 ¿Qué impacto podría tener?

Esta innovación tiene el potencial de acelerar la transición hacia un mundo sin combustibles fósiles, al facilitar el uso cotidiano de autos eléctricos y mejorar el rendimiento de las energías limpias. También podría reducir la basura electrónica, al aumentar la vida útil de dispositivos que hoy se descartan por degradación de batería.
A mediano plazo, compañías como Tesla, Samsung y BYD ya están invirtiendo en tecnologías similares, lo que indica que podríamos ver estas baterías en productos reales antes del 2027.
🧠 Dato curioso
Los nanotubos de carbono tienen una conductividad eléctrica 1000 veces mayor que el cobre, y son más resistentes que el acero, pero mucho más livianos. Su uso podría cambiar no solo las baterías, sino todo el diseño de dispositivos electrónicos.





